¡Pero pijo!

Ayer escuché por primera vez un fragmento del programa "Milenio 3" que dirige Íker Jiménez en la SER. Lo sintonicé por accidente mientras trasteaba con la radio del coche y encontré allí lo que me habían dicho que encontraría: autobombo y sensacionalismo barato. Gracias a esta circunstancia fortuita estaba un poco mejor preparado y dispuesto para las noticias que me esperaban esta mañana.

Resulta que desde las emisoras locales de la SER se han estado haciendo llamadas a planetarios y museos de la ciencia para pedirles su colaboración en un programa especial dedicado a la observación del cielo. Lo que no les han dicho es que ese programa especial no es ni más ni menos que una "alerta OVNI" convocada por "Milenio 3". Con este truco lograron engañar brevemente al Museo de la Ciencia de Castilla-La Mancha, que una vez puesto sobre aviso se apresuró a desmarcarse de semejante despropósito. Todo esto lo cuenta con pelos y señales Javier Armentia, director del Planetario de Pamplona, institución a la que estos insensatos también intentaron reclutar.

¿Cómo es posible que todavía, de vez en cuando, me sorprenda la miseria de estos traficantes de misterios? Tengo que enmendarme, pero ya.